Factores para elegir dominios en SEO internacional

¿Qué dominios elegir para SEO internacional?

Cuando se discute sobre el SEO a nivel internacional, una de las decisiones más importantes es la selección de dominios. Esto impacta no solo en la manera en que los motores de búsqueda interpretan tu sitio web, sino también en cómo es percibido por usuarios de varias naciones. A continuación, examinaremos diversas clases de dominios y su posible efecto en tu enfoque de SEO internacional.

Dominios geográficos de nivel superior (ccTLD)

Los dominios geográficos de nivel superior, también conocidos como ccTLDs en inglés, son particulares para cada nación y concluyen con extensiones como .es, .fr o .mx. Optar por un ccTLD puede ser ventajoso si pretendes centrarte en un mercado determinado, ya que aporta confianza y presencia local.

Por ejemplo, cuando una compañía en España utiliza un dominio .es, los internautas en España podrían considerar la página más pertinente y segura. Aparte de eso, los buscadores suelen dar preferencia a los ccTLD locales en sus propios territorios. No obstante, el inconveniente es que deberás manejar más de un sitio si aspiras a crecer en varios países, lo que podría elevar notablemente los gastos y la complejidad en las operaciones.

Extensiones de dominio genéricas (gTLD)

Los dominios de nivel superior genérico como .com, .net o .org son una alternativa viable para estrategias de SEO internacional. Estos no están asociados a ningún país específico y ofrecen flexibilidad para dirigirse a una audiencia global sin la necesidad de múltiples sitios web.

La implementación de un gTLD junto con subdirectorios (como example.com/es) o subdominios (es.example.com) facilita la división del contenido para diversas regiones o lenguas. No obstante, es crucial aplicar correctamente las etiquetas hreflang para garantizar que los motores de búsqueda entiendan qué versión del sitio deben presentar a los usuarios de distintas localidades.

Subdominios vs. Subdirectorios

Una discusión frecuente en el mundo del SEO es el uso de subdominios frente a subdirectorios. Los subdominios permiten separar versiones del sitio para distintos idiomas o regiones como si fueran casi independientes. Aunque este enfoque ofrece más control individualizado, puede diluir la autoridad general del dominio.

Por otra parte, los subdirectorios refuerzan la autoridad del dominio principal, lo que podría ser beneficioso si se busca mejorar el perfil SEO de un único sitio web global. Google ha indicado que ambos métodos son aceptables si se aplican adecuadamente, aunque el uso de subdirectorios tiende a ser más fácil de manejar.

Implementación de etiquetas hreflang

Las etiquetas hreflang son fundamentales al implementar un dominio internacional. Estas etiquetas ayudan a los motores de búsqueda a entender la relación entre las diferentes versiones de tu sitio web y a mostrar la versión correcta basada en la localización e idioma del usuario.

Por ejemplo, al tener un sitio web con contenido en español para Argentina y otro para España, la correcta utilización de hreflang asegurará que los usuarios en Argentina vean el contenido adaptado a su variante local del idioma. La implementación errónea de estas etiquetas puede resultar en problemas de duplicidad y afectar negativamente la clasificación del sitio.

Estudios de caso reales

Examinando casos reales, empresas como Airbnb han optado por el uso de gTLDs debido a su necesidad de globalidad. Airbnb utiliza subdirectorios para segmentar contenido por idioma y país, maximizando así su presencia global mientras mantiene una fuerte autoridad de dominio.

Sin embargo, empresas locales como el Banco Santander han logrado éxito utilizando ccTLDs, lo que les ha permitido fortalecer su presencia en mercados específicos de España, Reino Unido y otros lugares. Esta táctica ha incrementado notablemente la confianza de los clientes y su posicionamiento en los buscadores locales.

Cuando se piensa en cuál es la elección más adecuada de dominio para SEO a nivel internacional, es esencial analizar el mercado al que se quiere llegar, los recursos con los que se cuenta y la necesidad de adaptar el contenido para cada área geográfica. Este procedimiento complicado demanda una atención meticulosa y un planteamiento estratégico, lo cual puede determinar el triunfo de una empresa en el vasto y difícil entorno digital global.